Los conflictos por temas de dinero son muy comunes entre las parejas. Independientemente de que éstas últimas estén iniciando su matrimonio – o convivencia-, o lleven mucho tiempo en ella, el dinero es un tema que genera fisuras en la relación, grietas que luego se reflejan en otras áreas.
La preocupación de muchos es que, a pesar de que han hecho esfuerzos para poder conciliar y llegar a acuerdos sobre la mejor forma de manejar las finanzas en el hogar, al final no logran los resultados esperados y las discusiones, junto a la desconfianza, continúan siendo el pan de cada día.
Algunas parejas optan por dejar el tema a un lado, ignorarlo, y tratar de llevar su relación conviviendo con el estrés constante que generan este tipo de reproches y discusiones. Otras relaciones, sencillamente, no soportan tanta presión y descuerdo, y terminan por separarse.
Estemos de acuerdo o no, el dinero ocupa un lugar en la vida de las personas, nos genera emociones y cada uno tiene un concepto diferente de él, que generalmente está asociado a las creencias que hemos heredado de nuestra propia historia familiar.
Desde niños nos vamos programando financieramente, a partir de todas las cosas que oímos y vimos día a día acerca del dinero. Aprendimos con el ejemplo que recibimos de nuestros padres o personas cercanas, esto hace que para muchos el dinero sea algo malo, causante de problemas, que representa poder, control y dominio sobre los demás, o que, por el contrario, sea considerado una herramienta que bien utilizada nos procura bienestar y progreso.
Las creencias dependen del ambiente en el cual nos hemos desarrollado, es por esto que para las parejas no es tan sencillo conciliar el tema. No se trata de que no exista amor y compromiso mutuo, sino que desconocen realmente la forma como cada uno se relaciona con el dinero, sus creencias y las emociones que les genera.
Dedicarse un tiempo a proponer y responder preguntas como las siguientes les permitirá identificar de dónde surgieron y cuáles son las raíces de sus creencias acerca del dinero:
¿Qué recuerda haber escuchado y visto sobre el dinero?
¿Cómo era la situación financiera en su hogar?
¿Cómo eran las personas que lo criaron en cuanto al dinero?
Estas personas, ¿alegaban por el dinero? ¿Cómo administraban el dinero?, tenían dichos o creencias como: ¿El dinero es malo?
Para tener un punto de partida y poder llegar a acuerdos en el tema de las finanzas es necesario que las parejas realicen una evaluación conjunta de sus creencias acerca del dinero y así mismo evalúen cuáles de ellas aportan valor y cuáles se convierten en la barrera que impide que el tema entre los dos fluya. De esta manera podrán transitar por la vía del progreso y el bienestar individual y familiar.
Lo ideal es que, una vez desenmascaradas las creencias negativas a cerca del dinero, cada cónyuge tenga el firme propósito de trabajar para despojarse de las mismas e iniciar un proceso de reprogramación financiera que los catapulte hacía el logro de sus metas individuales y de pareja.
Gracias porque de manera sencilla, nos haces entender, la importancia de este tema en la vida familiar y personal!
Estimada Ana, el tema financiero sigue siendo un tabú entre las parejas, sin embargo debemos romper esas barreras. Revisar en pareja las creencias que cada uno tiene acerca del dinero les permitirá dar un paso muy importante en el proceso.